La familia Vivanco descubre en una finca y viña en Milagro una oportunidad para continuar desarrollando su mayor pasión: la cultura del vino.

Su reto es devolver el alma a la tierra y compartirla con los demás desarrollando proyectos que contribuyan desde la industria del vino, desde la cultura y la innovación a hacer del entorno de la finca un lugar rico y sostenible.

Es un proyecto pensado para personas que buscan algo que vaya más allá de los matices del vino. Que conectan con una filosofía de trabajo basada en el respeto por la materia prima, por el entorno; personas modernassensibles hacia nuevas formas de hacer, que recogen lo bueno del pasado y lo mejor del futuro.

Este escenario invitaba a desarrollar un proyecto auténtico y diferenciador; un proyecto que impactara positivamente en el entorno desde la combinación de la tradición y la innovación, sin perder de vista la sostenibilidad económica. Por ello, se planteó darle vida a la Finca para construir una identidad en torno a un lugar especial: Finca Milagro.

Los ejes sobre los que pivota el posicionamiento de la nueva marca se conformaron mediante una investigación prolongada sobre el territorio examinando el valor potencial de la propuesta de marca; orientándola a los 2 públicos principales (B2B y B2C) y creando estrategias complementarias pero diferenciadas.