Tradicionalmente Bermeo ha sido considerado un pueblo pesquero, especialmente enfocado al sector del atún.
La presencia de astilleros especializados en la construcción de atuneros congeladores, un sector conservero de prestigio internacional o su gran flota atunera han generado un impacto social y económico del sector a nivel mundial.
Por todo ello, Bermeo, los agentes de la cadena de valor del atún y las principales instituciones públicas vascas se unieron en torno a un ambicioso reto y confiaron en Bostnan para ayudarles a llevarlo a cabo: hacer de la industria de un recurso natural, como el atún, un tractor fundamental para el desarrollo económico y social del territorio.
Para ello, se creó la marca Bermeo Tuna World Capital y se definió un posicionamiento basado en la adhesión a una causa noble: promover a nivel global la gestión sostenible en torno al atún como recurso natural desde el conocimiento científico y el liderazgo de las buenas prácticas.